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Bogotá y Cundinamarca se unen por la alimentación de los más vulnerables

En un hecho sin precedentes, la ciudad de Bogotá y el departamento de Cundinamarca han suscrito un convenio que promueve la compra directa de alimentos a pequeños y medianos productores agropecuarios de la región central. Esta iniciativa tiene como objetivo principal abastecer de forma efectiva a las familias pobres y vulnerables de la capital colombiana.

Gracias a la colaboración entre la Secretaría Distrital de Integración Social y la Agencia de Comercialización e Innovación para el Desarrollo de Cundinamarca (ACIDC), se garantizará la entrega de canastas alimentarias y paquetes de alimentos a la población afrodescendiente y rural que se encuentre en situaciones de inseguridad alimentaria moderada o severa.

La alcaldesa Claudia López se mostró entusiasmada por este nuevo logro en favor de los campesinos y destacó que, además de comprar directamente a los productores para el programa de alimentación escolar en los colegios públicos de Bogotá, ahora la Secretaría de Integración Social se suma como un segundo gran comprador. Este convenio representa un avance significativo para fortalecer la economía rural y mejorar la calidad de vida en cada uno de los hogares de la región.

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Con la firma de este convenio, se beneficiarán un total de 8.279 personas, de las cuales 4.285 son afrodescendientes y 4.046 pertenecen al sector rural de la capital. Las primeras localidades beneficiadas serán Bosa, Chapinero, Ciudad Bolívar, Engativá, Kennedy, Rafael Uribe, San Cristóbal, Santa Fe, Suba, Sumapaz, Tunjuelito, Usaquén y Usme.

Se busca brindar apoyo constante a los grupos poblacionales más vulnerables.

Se estima que, para el 31 de diciembre de 2023, se entregarán de manera permanente 15.042 canastas alimentarias y se proyecta la entrega de 22.919 paquetes alimentarios a personas inscritas en los servicios sociales de la Secretaría Distrital de Integración Social. Esta iniciativa busca brindar apoyo constante a los grupos poblacionales más vulnerables y garantizar su seguridad alimentaria.

El gobernador de Cundinamarca, Nicolás García Bustos, agradeció el trabajo conjunto que ha hecho posible esta importante iniciativa de desarrollo económico en beneficio de los campesinos de la región. Destacó que esta colaboración permitirá fortalecer la cadena de producción local, asegurando que quienes siembran sean quienes venden, sin intermediarios y garantizando que los recursos lleguen directamente a quienes trabajan la tierra y a quienes residen en áreas rurales. Esta medida no solo busca garantizar la seguridad alimentaria, sino también mejorar la calidad de vida en cada uno de los hogares involucrados.

Con una inversión total de $8.789.064.890, siendo el 89% proveniente de la Secretaría de Integración Social y el 11% restante en especie por parte de la Agencia de Comercialización e Innovación para el Desarrollo de Cundinamarca, se demuestra el compromiso de las entidades estatales en respaldar a los pequeños productores y cumplir con lo establecido en la Ley 2046 de 2020.

Es importante destacar que las canastas alimentarias y paquetes entregados en las 20 localidades de Bogotá tienen como objetivo complementar las condiciones nutricionales de los beneficiarios, incluyendo productos frescos que contribuyen a mejorar sus necesidades nutricionales y promover hábitos saludables.

La compra directa a los pequeños y medianos productores fortalece la economía local.

Este convenio no solo representa un hito histórico para Bogotá y Cundinamarca, sino también un paso importante hacia la inclusión y el desarrollo sostenible de las comunidades rurales. La compra directa a los pequeños y medianos productores fortalece la economía local, fomenta el arraigo en el campo y promueve una mayor equidad en la distribución de recursos.

Con esta iniciativa, se sientan las bases para futuras colaboraciones y se busca expandir las compras públicas a otros servicios de alimentación de la Secretaría de Integración Social, asegurando que todos los programas y servicios se beneficien de la calidad y el amor con los que los campesinos cultivan sus alimentos.

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En resumen, este convenio entre Bogotá y Cundinamarca representa un gran avance en la lucha contra la pobreza y la inseguridad alimentaria, al promover la compra directa de alimentos a los pequeños y medianos productores de la región. Con una inversión significativa y el compromiso de las entidades estatales, se asegura la entrega de canastas alimentarias de calidad a las familias más necesitadas, fortaleciendo así la economía rural y mejorando la calidad de vida en toda la región central del país.

Más de 8.000 personas serán beneficiadas con 15.042 canastas alimentarias y 22.919 paquetes alimentarios.

Foto portada: Momento del acto protocolario de la firma del convenio.

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