Servicio Geológico Colombiano presenta nueva forma de evaluar actividad volcánica
El servicio Geológico Colombiano informó el jueves 14 de septiembre cambios importantes en la medición de la actividad volcánica en el país.
Teniendo en cuenta que en el momento existen alrededor de 25 estructuras volcánica activas monitoreadas por la entidad, este nuevo esquema espera ser más eficiente y permitir a las autoridades competentes y comunidades en zona de influencia, que conozcan con más precisión el comportamiento y evolución de la actividad volcánica.
Según la entidad, el cambio más importante con respecto al sistema anterior es que se evaluaba la probabilidad de erupción en términos de niveles, siendo esta medición imprecisa, ya que está basada en tiempo, desconociendo que la actividad volcánica es impredecible y no progresiva.
Ahora, la nueva medición se basa en “estados de alerta volcánica” que incluyen descripciones precisas sobre el comportamiento en curso de los volcanes, y que en el momento de un cambio de estado se presenten, por parte del servicio geológico, recomendaciones para las autoridades y comunidades en riesgo.
Los estados de alerta poseen los mismos cuatro colores, verde, amarillo, naranja y rojo, pero en el nuevo modelo no están relacionados directamente con la probabilidad de erupción ni se establecen en términos de progresividad lineal, sino se establecen como momentos de riesgo. De igual manera, ninguna categoría se vincula temporalmente con la probabilidad de erupción, y se pasa a considerar esta posibilidad en todos los estados.
El servicio Geológico Colombiano, especifica que los boletines serán entregados a la comunidad dependiendo del análisis de las manifestaciones o actividad que manifiesten las estructuras volcánicas.
Es decir que, para volcanes en estado verde, se generará un boletín mensual, para amarilla y naranja uno semanal y si se pasa a alerta roja se aumentará la periodicidad a diaria u horaria.
Esta actualización del marco de evaluación corresponde también a un acoplamiento con los estándares internacionales de medición, para entregar a la comunidad y a las autoridades escenarios más precisos de la actividad volcánica en el país.