Salmos de la biblia para momentos de ansiedad, tristeza o depresión

Encuentre paz y fortaleza en las palabras eternas.

20 de abril de 202447 views0

En los momentos más sombríos, cuando la ansiedad, la tristeza y la depresión nublan nuestro camino, muchos buscan refugio en las Escrituras. Los Salmos, en particular, han sido una fuente de consuelo y esperanza a lo largo de los siglos.

Cuando suceden este tipo de afecciones, lo mejor es buscar ayuda, tanto profesional como espiritual. Por tal razón, en este momento, Extrategia Medios, recomienda unos salmos que ayudan a superar todas las cargas emocionales y ver la vida de otra manera.

El Salmo 23 nos recuerda que no estamos solos en nuestros valles oscuros. “Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento” (Salmo 23:4). La promesa de guía y protección divina es un bálsamo para el alma turbada.
El Salmo 34 ofrece una visión de un Dios cercano y compasivo, que no está lejos de los quebrantados de corazón. “Cerca está Jehová de los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu” (Salmo 34:18). En sus versos, encontramos la afirmación de que, incluso en la contrición, hay salvación y cercanía divina.
El Salmo 42 es un diálogo íntimo del alma consigo misma y con su Creador. La pregunta retórica “¿Por qué te abates, oh alma mía?”, es seguida por un llamado a la esperanza y la alabanza, “Espera en Dios, pues aún he de alabarle, ¡salvación mía y Dios mío!” (Salmo 42:11), recordándonos que hay razones para la esperanza incluso cuando nos sentimos abatidos.

Finalmente, el Salmo 147 habla de un Dios que sana y restaura. “Él sana a los quebrantados de corazón, y venda sus heridas” (Salmo 147:3). La imagen de un Dios que venda las heridas es poderosa, sugiriendo un proceso de curación íntimo y personal.

En ellos, podemos encontrar la luz que disipa la oscuridad, la guía que nos lleva a través del valle, y la promesa de que la tristeza puede dar paso a la alabanza.