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El Castillo Marroquín de Chía: uno de los lugares más terroríficos de Colombia

Desde su construcción en el año de 1988, el Castillo Marroquín ubicado en la vía La Caro (entre Chía y Bogotá), guarda entre sus ambiguas y envejecidas paredes historias que entrelazaron quizá la leyenda más terrorífica de Sabana Centro.

Una misteriosa desaparición:

Trinidad y José María Marroquín contrajeron matrimonio y fruto de esta unión nació el expresidente de la República de Colombia José Manuel Marroquín. A los tres años de casados y de habitar las 61 hectáreas del predio, una tarde, Trinidad asistió a la pequeña capilla que se encontraba situada en la mitad de la Hacienda, sin embargo, aquel día la mujer salió del lugar con la excusa de buscar un chal para protegerse del frío y nunca regresó. Cuando los asistentes salieron de la eucaristía no la encontraron en ninguna parte, no estaba en casa, ni en el bosque alrededor del castillo. Lo que si encontraron fue su chal cerca del margen izquierdo del río Bogotá.

Aquí es donde la historia se mezcla con el rumor. Una supuesta acta parroquial del año 1828 estipularía que fue encontrada muerta en la laguna cercana a la Hacienda Yerbabuena. Su cadáver habría sido encontrado con signos claros de contusiones y golpes en la frente, la cara y el hombro derecho. De acuerdo con esta versión, estaría sepultada en Chía. Otra insinuaría al hecho de que, presuntamente, años después la vieron en Londres con un amante inglés con el que se escapó ese extraño día. Hasta la fecha no he podido seguir el rastro de ninguna de estas teorías, pero sí se comenta que los Marroquín mantuvieron siempre un resistente silencio en torno al asunto, aún más cuando la familia vendió el castillo y hubo varios residentes que murieron en extrañas circunstancias.

Un hospital psiquiátrico y varios muertos:

Tras las desapariciones, extrañas muertes, llantos y misterios. A mediados del siglo XX el lugar fue usado como un hospital psiquiátrico donde tras escenas de drama, gritos y alucinaciones, dos internos se suicidaron.

Tiempo después lo adquirió Guillermo Villasmil, un petrolero venezolano que, se sintió atraído por las dimensiones e historias de espanto al interior propiedad, sin embargo, el mismo día en que se cambiaría al castillo se estrelló en una avioneta en la que volaba de regreso a Chía.

Ipso facto, llegó al Castillo Marroquín habitante, un hombre ingenuo que gastó allí fuertes sumas de dinero en solicitar los servicios de una vidente tras encontrar de la noche a la mañana dos de sus caballos más costosos muertos y sin dientes.

Un aglomerado de fantasmas:

En la actualidad, muchas personas dicen ver o escuchar a una mujer con extremidades largas que camina con un bebé muerto entre sus brazos, a este supuesto espectro le llaman ‘La Zancona’.

A continuación, lo que presuntamente se escucha cerca de el Castillo Marroquín en las noches de luna clara:

El Castillo Marroquín guarda entre sus ambiguas y envejecidas paredes historias que entrelazaron quizá la leyenda más terrorífica de Sabana Centro.

Foto portada: Imagen del Castillo Marroquín. Autoría de Emanuel Ortiz, publicada en Flickr.

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