Por: Penélope Vargas Porras.

Muchas son las ideas que recorren mi cabeza cuando pienso en los feminismos, pues esta constante lucha ya hace parte de la pasión de mi alma y es que bien dicen que una vez entras a los feminismos ya no hay salida al cuestionamiento constante, por eso a través de este medio quiero compartir a mi consideración los aspectos más importantes que pertenecen a la lucha feminista:

1. Interseccionalidad: Siempre que habló de “los feminismos” expongo esta lucha en plural porque es la representación de este movimiento plasmado de diversidad, de diferencia. Es mi tarea como feminista dispuesta a la reflexión hablar del movimiento a través de la interseccionalidad, porque el hecho de que nos pertenezca el género no quiere decir que seamos per se una homogeneidad. La primera noción de interseccionalidad aparece en la década de los 70’ a través de movimientos feministas de mujeres negras estadounidenses que acusaban a las “hermanas blancas” por no identificar las dificultades que padecen las mujeres negras y pobres, más tarde la jurista Kimberlé W. Crenshaw en el University of Chicago Legal Forum de 1989 introduciría el término a la teoría feminista en su escrito “Demarginalizing the Intersection of Race and Sex: A Black Feminist Critique of Antidiscrimination Doctrine, Feminist Theory, and Antiracist politics.”

2. Sororidad: Este término se comienza a utilizar en la teoría feminista a principios de la década de los 70’ con Kate Millet en su libro Política Sexual, donde la autora expone el término “sisterhood” para dar a entender la hermandad entre mujeres que aun sin conocerse tienen el sentido de empatía y solidaridad especialmente en situaciones que afecten principalmente al género a causa del sistema patriarcal. Es indispensable a mi consideración mencionar esta palabra porque trasciende en la vida de las mujeres que aun sin pertenecer a los movimientos feministas por innatismo reaccionan con solidaridad ante el género.
Estos conceptos son las bases de la lucha. Representan el núcleo y el objeto, sin ellos el movimiento pierde esencia, veracidad y reputación. Fundamentarse en estos es prioridad para la existencia humana (del movimiento también) y el fin utópico del patriarcado, siendo o no parte de las luchas, siempre es bueno cuestionarse y así
mismo adquirir conocimiento.

*Adenda: Cualesquiera sean las formas en las que los feminismos exigen vida, dignidad, justicia y equidad de forma no bélica, sí son las formas, no hay que confundir vandalismo con iconoclasia.

 

Representan el núcleo y el objeto, sin ellos el movimiento pierde esencia,
veracidad y reputación.

Penélope del Mar Vargas
Estudiante de Relaciones Internacionales y Estudios Políticos de la Universidad Militar Nueva Granada, Fundadora de 'Dyvernal Podcast', Directora de la Red Índice Activista.

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