Más de $133.000 millones en cigarrillos y licores de contrabando han sido incautados en lo corrido de 2024 en Colombia, según reportó la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN). Se trata de un flagelo que no solo afecta la salud de los consumidores, sino que también golpea las finanzas públicas: esos recursos podrían haberse invertido en vías, colegios, hospitales e inversión social.
En medio de esta lucha, Cundinamarca se destaca por su ofensiva contra las mafias del contrabando. El gobernador del departamento, Fabián Rojas, afirmó que se han implementado acciones concretas para frenar este delito que afecta directamente el recaudo y los programas sociales.
“Solo en 2024 hemos destruido más de 20 toneladas de mercancías incautadas, que perjudicaban los ingresos del departamento. Además, tenemos 110 toneladas más almacenadas, listas para su destrucción”, aseguró Rey Ángel.
Cundinamarca, ejemplo nacional en la lucha contra el contrabando
El trabajo coordinado entre la Fiscalía General de la Nación, la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA), la Federación Nacional de Departamentos (FND) y la Secretaría de Hacienda de Cundinamarca, ha permitido lograr incautaciones efectivas y oportunas.
Las autoridades advierten que el contrabando de licores y cigarrillos no solo evade impuestos, sino que también introduce productos de dudosa calidad y alto riesgo para la salud de los consumidores.
¿Por qué es tan grave el contrabando?
El contrabando impacta negativamente en la financiación de programas esenciales del Estado, debilita el comercio legal y expone a los ciudadanos al consumo de productos adulterados o vencidos. Además, fortalece estructuras criminales que se lucran de la ilegalidad.
Las campañas de sensibilización, junto con las labores de inteligencia y control, seguirán siendo clave para proteger la economía legal y garantizar que los recursos públicos lleguen a donde más se necesitan.
Cundinamarca ha destruido 20 toneladas de contrabando y tiene 110 más listas para eliminación”.