By Contralor de Cundinamarca retiró del ‘muro de la transparencia’ tres huellas de alcaldes
Sanción moral a los funcionarios del departamento que quebranten el pacto público.
Ricardo López Arévalo, Contralor de Cundinamarca.
BOGOTÁ, CUNDINAMARCA.
La decisión adoptada por el contralor, Ricardo López Arévalo reafirma el compromiso de imponer sanción moral a los funcionarios del departamento que quebranten el pacto público que celebró con el gabinete departamental, alcaldes y gerentes de hospitales al comienzo de su administración para cumplir con la debida inversión de los recursos públicos y la integridad como servidores públicos.
De esta manera, el jefe del ente de control departamental retiró las huellas de las manos de los alcaldes de Yacopí, John Jaime Sánchez Sánchez, de Girardot, César Fabián Villalba Acevedo y de Diego Escobar Guinea, ex acalde de este último municipio.
“Hoy retiro estas tres huellas por que los servidores no cumplieron con la obligación moral que tenían con los más de dos millones de cundinamarqueses”, preciso López Arévalo. Al mismo tiempo, señaló que este es un reproche público que hace como contralor de Cundinamarca, y en representación sus habitantes.
El muro de la transparencia en el ente de control expone la huella que dejaron el gobernador del departamento, Jorge Emilio Rey Ángel, sus secretarios de despacho, los 116 alcaldes y los 52 gerentes de hospitales, en el marco de un acto simbólico denominado ‘manos limpias’.
El pacto establecido garantiza que los recursos de los cundinamarqueses se inviertan de manera adecuada y atendiendo los requerimientos de las poblaciones; además, de cumplir con una gestión responsable y transparente.
“Las huellas se encuentran en uno de los muros de la sede de la Contraloría de Cundinamarca, en Bogotá”.
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