By La Alcaldía Municipal de Zipaquirá, mediante el Consejo Municipal de Cultura, estableció el Estatuto Municipal de Cultura, donde se contempla la Orden al Mérito Artístico y Cultural Guillermo Quevedo Zornoza, el cual se otorga cada año a los mejores artistas de Zipaquirá, en sus diferentes expresiones.
En esta oportunidad, dentro de los premios otorgados a final del año 2021, Segundo Benjamín Corredor Blanco fue enaltecido, por unanimidad, en el ámbito de literatura. El 3 de diciembre se hizo el acto protocolario de entrega de los premios, en el cual Don Benjamín, como lo conocen cariñosamente en el medio, no pudo asistir, motivo por el cual el Consejo de Cultura delegó por intermedio de la Subgerencia de Cultura de Zipaquirá, al doctor José Antonio Pulido para hacer entrega de la Orden al Mérito que está representada en una hermosa medalla, en reconocimiento a sus escritos, no solamente en la prosa, los cuentos y los libros, sino también en artículos magistrales que fueron publicados en el Periódico El Espectador en su momento.
Palabras del Dr. José Antonio Pulido, miembro del Consejo de Cultura
“Agradezco al Consejo Municipal de Cultura este galardón, el cual significa un gran orgullo para mí; es un reconocimiento que tiene un valor intrínseco extraordinario a toda una vida de esfuerzo y dedicación a la literatura”, manifestó Benjamín Corredor.
Hizo un resumen de su obra literaria, sus significados, su recorrido en las letras y sus críticas literarias a la política de Colombia, las costumbres, acontecimientos en las diferentes regiones del país y lo social.
Palabras de agradecimiento de Benjamín Corredor
Segundo Benjamín Corredor Blanco nació en Moniquirá (Boyacá) el 31 de marzo de 1934. Cuando cumplió 14 años, por motivo de la violencia, su familia tuvo que residenciarse en Fusagasugá (Cundinamarca), donde residió dos años e incursiona en la literatura.
Por motivo de estudio y trabajo viajó a Bogotá donde vivió seis años. Allí continuó escribiendo poemas y pequeños ensayos, lo que había comenzado años atrás. Posteriormente se radicó en Zipaquirá (Cundinamarca) donde laboró como profesor de ingles y español en esta ciudad y en Bogotá. En esta localidad aprendió el periodismo y comenzó a escribir artículos para periódicos locales.
A comienzos de la década de los 60 creó el Círculo de Literatos Jóvenes de Zipaquirá. El Periódico El Espectador le publicó 7 cuentos, también el Boletín Cultural y Bibliográfico. La Biblioteca Luis Ángel Arango le publicó uno titulado: “Sangre de Cana”.
Estudió metodología de la enseñanza del español y del inglés en el Instituto Caro y Cuervo, y en la Universidad Nacional Lenguas Modernas.
Años después viajó a Nueva York donde permaneció por espacio de seis años, Trabajó y escribió su primer libro de poesía titulado: “En La Gran Ciudad”, el que a su regreso a Zipaquirá publicó en 1993. Allí se dedicó también al comercio, se casó y formó una familia con dos hijos. En 2006 el municipio le publicó el libro: “Voz y Silencio” en la colección “Letra de Sal”.
Gracias a su interés y perseverancia durante la década del 2000 hizo revivir en Zipaquirá las tertulias literarias que en otrora le dieron al municipio un lugar destacado en el entorno cultural, departamental y nacional, es así como nace la “Voz y el Signo”, tertulia literaria fundada y dirigida por Benjamín Corredor por espacio de varios años, espacio cultural que se desarrollaba los primeros viernes de cada mes desde las 6:30 de la tarde hasta las 9:00 de la noche en la Casa de la Cultura “Arturo Wagner”.
También integró las mesas directivas de la Casa Arturo Wagner, Casa Museo Quevedo Zornoza, y la Academia de Historia de Cundinamarca. Actualmente sigue escribiendo prosa y poesía.
Una de las mejores plumas de Cundinamarca, que alterna su labor con el impulso de los valores intelectuales de Zipaquirá.
Foto portada: Segundo Benjamín Corredor Blanco. Foto de Extrategia Medios.
