Ratifican prohibición de corridas de toros, peleas de gallos y cabalgatas: la Ley 2385 entrará en vigor en 2028

El Alto Tribunal ratificó la Ley “No Más Olé”, prohibiendo actividades que impliquen sufrimiento animal y otorgando un periodo de transición de tres años para su aplicación total.

Espada y capa en la plaza de toros. Imagen de referencia.
3 min de lectura
- Publicidad -

La Corte Constitucional confirmó la validez de la Ley 2385 de 2024, también conocida como “No Más Olé”, que prohíbe en Colombia las corridas de toros, el rejoneo, las novilladas, las becerradas y las tientas. La decisión, adoptada por unanimidad en Sala Plena con ponencia del magistrado Miguel Polo Rosero, marca un nuevo escenario en el debate sobre espectáculos con animales.

Prohibiciones ampliadas

El Alto Tribunal no se limitó a ratificar la eliminación de las prácticas taurinas. En su revisión incluyó otras actividades como las cabalgatas, las corralejas, el coleo y las peleas de gallos, todas cuestionadas por el sufrimiento animal que generan. Con esta determinación, Colombia avanza hacia un modelo de entretenimiento desligado de la violencia contra seres vivos.

Aunque la ley estaba prevista para entrar en vigor en 2027, la Corte estableció que su aplicación será diferida tres años a partir de este fallo. De esa manera, la norma comenzará a regir plenamente en 2028, con el propósito de dar un periodo de transición que permita la reconversión cultural y laboral de las comunidades que dependían de estas actividades.

Bienestar animal como mandato

La Corte Constitucional subrayó que la Ley 2385 tiene como finalidad aportar a una “transformación cultural en favor del bienestar animal”, al declarar exequibles los artículos que vetan espectáculos que afectan la integridad de formas de vida no humanas.

Con este pronunciamiento, Colombia se suma a los países que han eliminado espectáculos con maltrato animal. El fallo envía un mensaje firme sobre la necesidad de proteger la vida y fomentar nuevas formas de cultura y convivencia, sentando un precedente que trascenderá en los ámbitos legal, social y cultural.

Una decisión ejemplarizante

La decisión refleja un cambio cultural en la visión del entretenimiento en Colombia, priorizando el bienestar animal y desligando prácticas tradicionales de la violencia hacia los animales. El fallo fue unánime y se convierte en un referente legal y social, ya que busca transformar no solo la legislación, sino también las costumbres y economías vinculadas a estos espectáculos.

Lea También:  ‘Ni una tonelada más de carbón de Colombia a Israel’

Este fallo orienta a gobiernos locales, organizaciones sociales y gremios a impulsar nuevas alternativas culturales y económicas en comunidades afectadas por la prohibición. Asimismo, fortalece las políticas de protección animal y se convierte en un precedente jurídico para otros debates sobre derechos de los animales en el país.

También quedaron vetadas las cabalgatas, corralejas,
el coleo y las peleas de gallos.