Masacres en Estados Unidos “Un problema de fondo social y legal”: teoría del gran reemplazo

Por Daniel

Pánico y terror, es lo que se vive en varios espacios de convivencia con la población norteamericana, hemos visto a lo largo de la historia como nuestra sociedad y nuestro sistema legal ha sido catalogado como tercermundista e inoperante, pero los últimos acontecimientos nos demuestran que Estados Unidos no está tan alejado de nuestras dinámicas.

Estados Unidos históricamente se ha llegado a ver como un país que recibe a miles de personas de distintas regiones del mundo, la incidencia de su desarrollo también se ve reflejada por la mano de obra de comunidades latinas y afrodescendientes, tanto así que actualmente las cifras de su población, el 18% son de origen latinoamericano y un 16% son afrodescendientes.

La teoría del gran reemplazo: la situación es que en Estados Unidos se están empezando a ver tratados y postulados eminentemente discriminatorios y radicales frente al momento migratorio que está pasando el país norteamericano con países latinos, el pensamiento de algunos norteamericanos que están convencidos al afirmar que: los latinos nos están sustituyendo, se quieren apoderar de nuestro territorio, van a votar y pueden dañar el desarrollo social, vienen a robar, generan inseguridad, no benefician a nuestro país sino generan un gasto para el Estado.

El antecedente que encontramos en esta teoría es el libro escrito por Renaud Camus, en este defiende que las olas migratorias aspiran a terminar con la civilización blanca y cristiana, así como esta serie de libros también existen movimientos y colectivos supremacistas y nacionalistas radicales que promueven la idea de que la raza blanca es superior y está en constante amenaza por las demás que buscan el poder.

Si queremos ejemplos de discriminación que nos demuestren este comportamiento que es mundial debemos remontarnos al gran holocausto nazi, la masacre en Oslo (Noruega), Christchurch (Nueva Zelanda). Ahora bien, si analizamos el patrón que hay en Estados Unidos frente a la multiplicidad de masacres es demasiado alto, desde el 2017 se registran más de 10 masacres que han terminado con más de 120 vidas.

Estos escenarios se han visto en Estados como Texas, Florida, California, Colorado y Nueva York, los Estados donde más emigran y viajan latinoamericanos. En la mayoría de estas masacres los victimarios han usado rifles y fusiles semiautomáticos, armas que adquieren sin ningún tipo de examen psicológico o test de conducta, que le permite una gran facilidad y acceso a cualquier persona mayor de edad para la adquisición de un arma de groso calibre.

En este punto se necesita cuestionar un sistema legal que no es funcional ante una de las situaciones que sucede con frecuencia y en la mayoria de los casos se trata con mediocridad por parte de la justicia de Estados Unidos porque los perpetradores de estas masacres se le condena a pena de muerte o resultan ejecutados por la policía.

“El racismo sigue en vigor y continúa siendo una de las amenazas sociales más grandes en el mundo, la variedad de conflictos y olas migratorias demuestran que la empatía no es un valor intrínseco en la sociedad que muchas veces llega a erupcionar y colapsar en esta serie de situaciones desafortunadas que castigan a personas que por un pensamiento o una idea fundada resultan siendo víctimas de asesinatos en masa.”

Se espera que en el gobierno de Joe Biden haya una reformulación frente al sistema judicial y penitenciario que hay en estos casos, porque este escenario nos demuestra que Estados Unidos vive en una situación alarmante y hace ver una gran debilidad en el sistema legal para poder adquirir un arma en el territorio sin ningún tipo de restricción o estudio previo.

Foto portada: referencia. Tomada de: El Espectador.