En un país donde el agua potable debería ser un derecho garantizado, los números acaban de revelar una realidad mucho más preocupante: 280 municipios colombianos fueron clasificados en riesgo alto por el mal manejo de los recursos destinados a garantizar agua y saneamiento básico. El informe, publicado por el Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, evaluó la gestión del Sistema General de Participaciones (SGP) en su componente de Agua Potable y Saneamiento Básico (APSB), correspondiente al año 2024.
De los 1.103 municipios y distritos evaluados, apenas 51 superaron con éxito los cuatro indicadores claves que miden la calidad de estos servicios. En contraste, cientos de localidades —muchas de ellas rurales— siguen sumidas en una gestión deficiente que pone en jaque la salud pública de millones de personas.
Graves brechas entre zonas urbanas y rurales
El monitoreo incluyó aspectos como calidad del agua, tratamiento de residuos, continuidad del servicio y cobertura. Y los hallazgos son tan claros como inquietantes:
- Solo 80 municipios cumplen con el suministro de agua apta para el consumo humano en zonas urbana y rural.
- 539 municipios cumplen el indicador de tratamiento de aguas residuales.
- 1.021 municipios cumplen con la disposición final adecuada de residuos sólidos.
Sin embargo, la verdadera alarma suena en las zonas rurales: mientras el 56% de los municipios logra suministrar agua potable en zonas urbanas, solo el 9,7% lo hace en áreas rurales.
En cuanto a la continuidad del servicio, aunque hubo una leve mejora frente al año anterior —22,6 horas de suministro diario en promedio en 2024 frente a 21,6 en 2023—, 401 municipios ni siquiera reportaron información sobre este indicador, lo que deja enormes vacíos para tomar decisiones acertadas.
Uso inadecuado de los recursos y fallas en los subsidios
El informe también reveló que el 53% de los municipios no cumple con el uso adecuado de los recursos asignados. Aunque el 91% de los fondos —más de $2,8 billones— se destinó correctamente, $229 mil millones fueron usados de forma indebida. A esto se suma que 396 municipios no reportaron pagos u obligaciones de subsidios, o lo hicieron con porcentajes muy por debajo de lo exigido por la normativa.
Hay un grupo especialmente crítico: 28 municipios han sido clasificados en riesgo alto de manera reiterada entre 2021 y 2024. Están ubicados en departamentos como Bolívar, Cauca, Chocó, Córdoba, Cundinamarca, Tolima, y otros más apartados como Guainía, Vaupés y Putumayo. Son territorios donde la falta de acceso a agua potable y saneamiento adecuado no es solo una cifra en un informe técnico: es una amenaza constante para la vida y la dignidad de sus habitantes.
Recomendaciones urgentes del Ministerio
El Ministerio, como cabeza del sector, ha formulado varias recomendaciones urgentes:
- Priorizar acompañamiento técnico a los 28 municipios reincidentes en riesgo alto.
- Implementar estrategias de inversión con enfoque rural, diferencial y territorial.
- Fortalecer la ejecución del presupuesto y evitar desviaciones que afecten la calidad del servicio.
- Promover alianzas entre entes territoriales, prestadores y organizaciones comunitarias.
- Mejorar la coherencia entre planes de desarrollo municipales, proyectos y recursos disponibles.
La situación exige no solo alertas institucionales, sino un compromiso firme de los gobiernos locales, los prestadores de servicios y la ciudadanía. Porque mientras el agua siga sin llegar, y los recursos sigan diluyéndose, las promesas del desarrollo seguirán secas en muchos rincones de Colombia.
El 53 % de municipios incumple el uso adecuado de los
recursos del SGP-APSB.