Se tenía previsto que en el departamento la temporada de lluvias iniciaban el 16 de marzo y las precipitaciones alcanzan su máximo nivel entre abril y mayo, este año el fenómeno climático se anticipó y se extenderá hasta mediados de junio del presente año.
“Queremos recomendar a todos los cundinamarqueses que en esta temporada de lluvias tengamos bastante prudencia con nuestras fuentes hídricas y no arrojemos basuras, pues los ríos y quebradas han presentado crecientes. La invitación es a que entre todos nos cuidemos”, dijo Gina Herrera, directora de la Unidad Administrativa Especial de Gestión del Riego de Desastres (UAEGRD).
Hasta hoy las diferentes emergencias presentadas por las lluvias de los últimos días han sido controladas evitando consecuencias graves. En la última semana más de 100 viviendas fueron afectadas por separación en masa en Fusagasugá. Se presentó una palizada en el rio Calandaima que afectó la estructura del puente que comunica a Apulo con Viotá. En Tocaima, un motociclista fue arrastrado por una quebrada hasta el municipio de Agua de Dios. En Tena, 51 ciclistas fueron sorprendidos por una creciente. Y para evitar más situaciones que ponen en riesgo a los ciudadanos, se trabaja en articulación con las alcaldías de Pasca y Zipacón para prevenir posibles afectaciones.
Por este motivo, desde la UAEGRD se reitera la importancia de aumentar el monitoreo desde el Centro de Información y Telecomunicaciones (CITEL) reportando a diario y en tiempo real cualquier situación mínima de riesgo que se presente, para prevenir así, circunstancias que puedan afectar a las comunidades.
En este sentido, los coordinadores municipales para la Gestión del Riesgo y los cuerpos operativos como Bomberos Voluntarios, Defensa Civil, Cruz Roja, Policía y Ejército se encuentran preparados realizando trabajos para aminorar las posibles inundaciones y deslizamientos.
En esta temporada de lluvias tengamos bastante prudencia con nuestras fuentes hídricas y no arrojemos basuras para evitar crecientes e inundaciones.
