El asesinato del excandidato presidencial Carlos Pizarro, en abril de 1990, fue un suceso que marcó significativamente el escenario político de la década, en el momento del suceso, aunque se aprehendió al autor material del hecho, Andrés Gutiérrez Uribe, perteneciente a las AUC, no se conoció quien ordenó su asesinato.
Ahora, 34 años después de su asesinato, la Fiscalía General de la Nación, estableció que un funcionario asociado al Gobierno de la época estuvo involucrado en el homicidio de Pizarro, siendo este funcionario el coronel (R) de la policía, Manuel Antonio González Henríquez.
De acuerdo con la fiscalía, el coronel González «fue vinculado formalmente como presunto responsable de los delitos de homicidio con fines terroristas, concierto para delinquir y porte ilegal de armas o municiones de uso privativo de las Fuerzas Armadas».
Por lo tanto, deberá cumplir una medida de aseguramiento de detención preventiva en el lugar de residencia, esto según la Ley 600.
De igual forma, la fiscalía asegura que entre los años 1989 y 1990, el coronel González, estuvo al frente de la coordinación de los esquemas de protección de los candidatos presidenciales y otras personalidades públicas, por lo que este habría hecho uso de las facilidades de sus funciones para realizar cambios y rotaciones del personal de seguridad de Pizarro.
Por lo cual, se determinó que Manuel González “facilitó el actuar del sicario y el cumplimiento del plan criminal”.
Ahora, 34 años después de su asesinato, la Fiscalía General de la Nación, estableció que un funcionario asociado al Gobierno de la época estuvo involucrado en el homicidio de Pizarro
Foto portada: X María José Pizarro