El mundo despide a una figura trascendental que fusionó la excelencia científica con el liderazgo espiritual. Russell M. Nelson, presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, falleció el pasado 27 de septiembre, a los 101 años, dejando un vacío en los 17 millones de fieles que guidó por casi una década
Del Quirófano al Ministerio Global: La Vida de un Visionario
Russell M. Nelson no fue un líder religioso convencional. Antes de dedicarse por completo al ministerio, el presidente Nelson forjó una carrera médica brillante que revolucionó la cirugía cardiovascular. Como cardiocirujano pionero, realizó la primera operación a corazón abierto en Utah en 1955 y contribuyó al desarrollo de la máquina de circulación extracorpórea, tecnología que permitió salvar incontables vidas.
Su perspectiva única fusionaba ciencia y fe de manera profound. «Creo que un cirujano está en una posición singular para comprender una de las creaciones más maravillosas de Dios: el cuerpo humano», declaró en una ocasión, encapsulando la filosofía que guiaría su vida.
Liderazgo Transformador: 32 Países, 11 Idiomas y Una Misión Global
Al asumir el liderazgo en enero de 2018, el Presidente Nelson inició uno de los periodos más transformadores en la historia de la Iglesia. Su enfoque global se manifestó en giras ministeriales por 32 países, donde sorprendía a los fieles al dirigirse a ellos en sus idiomas nativos, dominando 11 lenguas incluyendo chino y ruso.
Sus esfuerzos ecuménicos rompieron barreras históricas. En 2019, su encuentro con el Papa Francisco en el Vaticano marcó un hito en el diálogo interreligioso. «Su Santidad fue muy amable, cálido y acogedor», comentó Nelson sobre el pontífice. Simultáneamente, estableció una alianza histórica con la NAACP, la organización de derechos civiles más antigua de Estados Unidos, promoviendo iniciativas educativas y de entendimiento mutuo.
La Revolución Nelson: 200 Templos y Cambios Históricos
Bajo su liderazgo, el presidente Nelson anunció la construcción de 200 templos nuevos, la expansión más ambiciosa en la historia de la Iglesia. Pero su legado arquitectónico palidece en comparación con los cambios doctrinales y organizativos que implementó:
· Enfoque en el nombre completo de la Iglesia
· Reorientación de la instrucción religiosa hacia el hogar
· Nuevos programas globales para niños y jóvenes
· Modificaciones históricas a normas de bautismo y matrimonio
· Reorganización completa de las estructuras de liderazgo
«Presidente Nelson, no sé cuántas ‘avalanchas’ más podremos soportar», bromeó el élder Jeffrey R. Holland durante una conferencia general en 2018, reflejando el ritmo acelerado de transformación.
Russell M. Nelson, el hombre detrás del Profeta: Amor, Pérdida y Segundas Oportunidades
La vida personal de Nelson estuvo marcada por un profundo amor familiar. Su primer matrimonio con Dantzel White duró 59 años y fue testigo del nacimiento de sus 10 hijos. «La primera cosa que hacía al llegar a casa era buscar a mi madre y saludarla con un beso», recordó su hija Gloria Nelson Irion.
Cuando Dantzel falleció inesperadamente en 2005, su fe se mantuvo inquebrantable. «Si pueden tener fe en Él y conectarse con Él, tendrán la fortaleza para soportar las pruebas», enseñaba el presidente Nelson, demostrando una resiliencia que inspiraría a millones.
En 2006, contrajo matrimonio con Wendy L. Watson, una terapeuta familiar canadiense que se integró completamente a la familia Nelson. «Fue un cambio enorme», admitió ella, destacando los desafíos y bendiciones de unirse a una familia tan numerosa.
El Legado que Perdura: Puentes entre Ciencia y Fe
El presidente Dallin H. Oaks, primer consejero en la Primera Presidencia y posible sucesor, describió a Nelson como «la persona más amable y dulce con la que uno podría relacionarse», destacando su extraordinaria modestia a pesar de sus logros monumentales.
El fallecimiento de Russell M. Nelson marca el final de una era pero sella el legado de un hombre que construyó puentes entre mundos aparentemente distantes: entre la ciencia y la fe, entre naciones y religiones, entre tradición y progreso.
Mientras el Quórum de los Doce Apóstoles se prepara para elegir a su sucesor, millones alrededor del mundo recuerdan al hombre que sanó corazones, tanto física como espiritualmente.