¿Cuál debería ser el salario mínimo para el próximo año?

¿Cuál es su opinión? ¿Qué piensa usted? ¿Cuál debería ser..? ¿Cómo mejorarlo?

Foto/Cortesía/UN.

ZIPAQUIRÁ, CUNDINAMARCA.

Existen en Colombia varias Centrales Obreras, quienes a nombre de los trabajadores, buscan establecer en ‘acuerdo’ con el Gobierno Nacional, la base del salario mínimo para las y los y trabajadores colombianos.

Desde hace muchos años, esas discusiones se han convertido en un saludo a la bandera, porque finalmente los ‘representantes de los trabajadores de base’ se levantan de la mesa y dejan que por decreto el Gobierno, a través de MinTrabajo fije el monto económico que devengará un asalariado para el siguiente año.

Se dice que llegan a acuerdos, pero quienes sufren el desconsuelo son miles de familias que se ven traicionados y amarrados por los negociadores, quienes en medio de las fiestas de fin de año, terminan por ceder al antojo ministerial.

Y… no pasa nada. El salario mínimo actual está en los $737.717 más un auxilio de transporte de $83.140. Aterrador!!! Muy aterrador ante tantas y tantas necesidades que tiene un padre o una madre de familia, pero también aterrador, porque en muchos casos los empresarios no encuentran cómo ajustar a un mejor salario cuando la cascada de impuestos de una y otra forma atentan contra el buen desarrollo empresarial causando graves traumatismos en la generación de empleo y en la búsqueda de un mejoramiento de la calidad de vida de sus trabajadores.

Dónde están los sindicatos que se quedan petrificados en estas fechas y no marchan por las calles exigiendo mejores oportunidades de apoyo al trabajador raso, como si ellos no importaran nada? Por qué no apoyan al pequeño y microempresario para encontrar mejores oportunidades de desarrollo y de bienestar para la gente con mínimo salario?

Donde están los políticos y aspirantes a ocupar cualquier curul o cargo público en la nación, en el departamento o en los municipios que no exigen y se paran frente al Gobierno con decisión, para que mejore ostensiblemente el sueldo de miles de familias que sufren el hambre y la desidia de malos gobiernos, que solamente les interesa sus intereses personales?

Dónde están varios de los líderes religiosos, quienes mal interpretan la voluntad de Dios, y piensan que para salvarse hay que ser pobres, confundiendo pobreza con humildad?

Dónde están los ‘grandes’ medios de comunicación que no reflejan ni ponen en evidencia la verdadera pobreza que sufre el país?

Y donde estamos los demás que nos dejamos engañar y esperamos a que otros hagan lo que nosotros tenemos que hacer?

Un pueblo en la miseria es un pueblo esclavo y fácil de manipular, porque cualquier ‘favorcito’ que le hagan por barato que sea, le cuesta, lo compromete y lo esclaviza aún más.

La solución no es crear ni aprobar más impuestos. Es contrarrestar la corrupción y a los politiqueros que la promueven y a otros politiqueros que también la viven y dicen que la van a acabar. Corrupción no acaba corrupción.

Pero lo bueno es que entre caníbales, se miran con deseo y entre ellos se lanzan mordiscos.

La verdadera justicia sí acaba corrupción. Por sus obras los conoceréis dijo Jesucristo.

La cascada de impuestos no genera desarrollo, por el contrario hace cerrar empresas y oportunidades laborales, mientras que el apoyo a empresarios, pequeños, mediamos y grandes, generan mayores posibilidades de empleo y generación de desarrollo con mejores calidades de vida.

Tampoco necesitamos un gobierno paternalista, necesitamos un gobierno que permita el progreso empresarial y laboral, que no ponga trabas  a la posibilidad de emprendimiento ni de formación y que apoye. 

Hay que pagar impuestos, claro que sí, pero en sus justas proporciones, sin destruir y acabar con entidades y organizaciones que suplen la necesidad laboral y generan lo que el Estado no es capaz de suplir. Eso es como matar la gallina de los huevos de oro.

No es un comentario pesimista, por el contrario es un comentario que nos invita a pensar y levantarnos todos los días con optimismo, confianza y fe en Dios, buscando nosotros también oportunidades de desarrollo y bienestar. Es una reflexión al Gobierno y para que nosotros a nivel personal hagamos lo propio y trabajemos por nuestras familias, nuestro municipio y nuestro país. Insisto si no hacemos lo que tenemos que hacer nosotros, nadie lo hará por nosotros.

Ánimo, éxitos y buena suerte!!! Usted que opina?

“La solución no es crear ni aprobar más impuestos. Es contrarrestar la corrupción y a los politiqueros que la promueven y a otros politiqueros que también la viven y dicen que la van a acabar. Corrupción no acaba corrupción”.