Mientras la temporada decembrina avanza y se incrementa el uso de pirotecnia en distintos puntos del país, Bogotá puso en marcha una estrategia de alcance distrital orientada a proteger a los animales domésticos y silvestres frente a los efectos del ruido y las explosiones.
El alcalde Carlos Fernando Galán Pachón presentó este martes el Compromiso Bogotano por unas fiestas sin pólvora, una iniciativa que busca transformar prácticas culturales arraigadas y promover celebraciones responsables en los barrios de la capital.
Una advertencia desde el bienestar animal
Desde el enfoque técnico, el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA) reiteró que no existe pólvora “segura” para los animales. Su director, Antonio Hernández Llamas, explicó que las detonaciones generan miedo, ansiedad, desorientación y alteraciones físicas severas en perros, gatos y fauna silvestre, efectos que en algunos casos pueden derivar en consecuencias irreversibles.
La pirotecnia, señaló, afecta de manera directa los sentidos de los animales, altera su comportamiento y expone a miles de ejemplares a situaciones de alto riesgo durante las festividades.
El papel de las comunidades en la estrategia distrital
Uno de los ejes centrales del compromiso es su enfoque comunitario. La estrategia involucra a cerca de 1.700 Juntas de Acción Comunal, 20 Asociaciones de Juntas y más de 20.000 copropiedades bajo el régimen de Propiedad Horizontal, lo que permite llevar el mensaje de prevención directamente a barrios, conjuntos residenciales y espacios de convivencia cotidiana.
Más de 20.000 dignatarios comunales serán los encargados de promover activamente celebraciones sin pólvora en sus territorios, convirtiendo el pacto en una acción de corresponsabilidad ciudadana y no solo en una directriz institucional.
Un llamado a cambiar comportamientos
Durante el lanzamiento, el alcalde Galán insistió en la necesidad de modificar conductas profundamente arraigadas y priorizar el respeto por la fauna urbana. En su intervención, subrayó que la protección animal requiere una acción coordinada entre ciudadanía, proteccionistas e instituciones distritales.
“Necesitamos que juntos elevemos la voz y le digamos a los bogotanos que comprendan lo que esto implica. Cambiar nuestros comportamientos y dejar de usar pólvora nos permitirá relacionarnos de una manera distinta con los animales que comparten la ciudad con nosotros”, afirmó el mandatario.
Articulación institucional para una causa común
El alcalde destacó que la iniciativa es resultado de un trabajo articulado liderado por el IDPYBA, en coordinación con entidades como TransMilenio y las secretarías de Movilidad e Integración Social, entre otras dependencias del Distrito. Esta coordinación busca reforzar los mensajes preventivos y ampliar el alcance de la campaña en distintos escenarios urbanos.
“El compromiso debe construirse con la sociedad civil. Ustedes transmiten de forma directa y legítima las preocupaciones de la ciudadanía frente al bienestar animal, y ese diálogo es fundamental para el Distrito”, expresó Galán Pachón al agradecer la participación de los actores comunitarios.
Propiedad horizontal y convivencia responsable
Desde el sector residencial, la consejera Distrital de Propiedad Horizontal, María Teresa Arenas, señaló que el compromiso tiene un impacto directo en 20.412 edificios y conjuntos residenciales, donde la convivencia entre personas y animales exige acuerdos claros durante las festividades.
La iniciativa busca fortalecer normas de respeto colectivo y promover celebraciones que no afecten a quienes conviven con animales de compañía.
Una invitación abierta a vivir unas fiestas sin pólvora
El presidente de la Federación Comunal de Bogotá, David Castaño, explicó que las Juntas de Acción Comunal invitarán a los residentes a abstenerse de usar pólvora como una medida concreta de protección animal. La apuesta, señaló, es vivir unas fiestas decembrinas basadas en la convivencia, el respeto y la conciencia colectiva.
El Compromiso Bogotano por unas fiestas sin pólvora se proyecta como una acción de ciudad que traslada la responsabilidad a los territorios, con el objetivo de reducir el impacto de la pirotecnia y proteger a quienes no pueden defenderse del ruido y las explosiones.
La iniciativa involucra a 1.700 Juntas de Acción Comunal,
20 asociaciones y más de 20.000 copropiedades en Bogotá.
