By Auto cuidado y el cuidado a los demás (AUDIO)
Nuestros valores y principios también juegan un papel fundamental en tiempos de crisis y seguro nos van a ayudar a salir a delante esta.
Foto referencial/Cortesía.
ZIPAQUIRÁ, CUNDINAMARCA.
Doris Margarita Algarra Echenique.
“Nuestros valores y principios también juegan un papel fundamental en tiempos de crisis y seguro nos van a ayudar a salir adelante. Hoy por hoy la solidaridad es como una cadena que nos sirve para jalar un carro que se ha ido a un barranco”: Doris Margarita Algarra Echenique, Psicóloga y Orientadora de la Institución Educativa Liceo Integrado de Zipaquirá».
Recordemos que estamos haciendo un proceso de reinventarnos, como aprendimos en el anterior podcast, haciendo referencia a la permanencia en casa, por esto, Doris Margarita Algarra Echenique, Psicóloga y Orientadora de la IEM Liceo Integrado de Zipaquirá, nos invita para que cada uno desde su casa o el lugar en donde se encuentre confinado, niña niño, adolescente, joven, adulto, piense por un momento que por más difíciles que sean las situaciones que estemos enfrentando, y sabemos que para algunas personas son mucho más complicadas que para otras, porque no solo puede ser las escases económica, también pueden estar a travesando por una dificultad de salud relacionada con el covid 19 o con otra enfermedad, algún familiar o incluso ustedes mismos, pero son las circunstancias que se están viviendo, y no las podemos obviar, están ahí y tenemos que hacerles frente… pero cómo?
Un primer paso, podría ser el reconocimiento de aquellas cosas que están en nuestras mismas manos y que pueden cambiar para mejorar. Por ejemplo, si se tiene un alto nivel de estrés que lo está afectando en su salud física y mental y además esto está interfiriendo en la comunicación y las relaciones con los miembros de la familia, emprenda algunas acciones, que estén a su alcance y que podrían ir desde tomar recomendaciones de las que por estos días circulan en todos los medios, como por ejemplo: organizar los tiempos y espacios de trabajo, realizar agendas con horarios y cumplirlas, realizar ejercicios físicos y de relajación, y en los momentos de trabajo hacer pausas activas, tomar los alimentos en los horarios establecidos, mantener una buena higiene del sueño, que por estos días se ve tan afectado, (comer temprano, alistar el lugar de dormir, realizar actividad física durante el día, relajarse horas antes de dormir, evitar noticias o información que altere nuestros pensamientos, leer antes de acostarte (una lectura recreativa). En algunos casos si se requiere, hasta buscar ayuda profesional, aprender de esta situación que debemos afrontar para mejorar y con esto, estamos aportando al cambio de manera positiva en nuestro entorno.
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Un segundo paso tiene que ver con identificar lo bueno que ocurre en medio de lo malo, y un ejemplo claro es lo que ha ocurrido en medio de esta pandemia, donde también se ha despertado algo muy positivo y es un sentimiento de solidaridad entre las comunidades, entonces vemos que muchos estamentos no gubernamentales locales, regionales, empresas privadas, nuestro vecino, un familiar o uno mismo, ha realizado algún acto movido por la solidaridad y las ganas de ayudar a alguien que lo necesita. (comparto un mercado, dono dinero, doy una palabra de aliento, escucho al que lo necesita).
“Hay un movimiento que se genera en la crisis y nos lleva a reinventarnos, y quiero tomar como ejemplo a mis compañeros docentes, quienes han tratado de estar a la altura de las circunstancias, y se han puesto a la tarea de diseñar estrategias pedagógicas virtuales, incluso muchos se han puesto a la tarea de avanzar en sus conocimientos en el uso de herramientas virtuales y uso de plataformas tecnológicas para llegar a los estudiantes; acompañarlos brindarles los medios y que sientan lo importantes que son para sus maestros”, manifiesta la psicóloga.
Hemos visto cómo algunos coordinadores y docentes han roto con el confinamiento, por salir a las Instituciones Educativas a entregar la alimentación escolar, movidos por el sentido de la solidaridad y pensando en esa necesidad de muchos. Buscar a cada uno de los estudiantes, inclusive con sus propios recursos, para contactarlos y poderlos atender, brindarles un espacio pedagógico, pero también de distracción y reencuentro con sus amigos y compañeros.
Por supuesto que están los profesionales de la salud, quienes están dando una gran lección de valor ético, porque aún, arriesgando su vida y su salud, llegan todos los días a los hospitales y las clínicas con condiciones precarias, incluso arriesgadas, a atender a quienes están allí, esperándolos.
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Con esto quiero decir la Psicóloga, que nuestros valores y principios también juegan un papel fundamental en tiempos de crisis y seguro nos van a ayudar a salir adelante. Hoy por hoy la solidaridad es como una cadena que nos sirve para jalar un carro que se ha ido a un barranco.
“Un tercer paso tiene que ver con la forma en como estamos cuidando nuestras relaciones familiares. No es un secreto que, en las últimas semanas, los casos de violencia intrafamiliar se han elevado de manera angustiante, y no menos el maltrato a los niños, niñas y adolescentes, también el abuso sexual. Sabemos que infortunadamente en nuestras prácticas culturales y en los estilos de crianza hay un arraigado uso de la violencia, especialmente en la forma de relacionarnos especialmente con los más vulnerables, Por ello, considero que la clave está en la Empatía, como una conexión hacía lo que el otro siente, me conecto con su emoción”, asegura la orientadora.
Argumenta que en este punto, que hace referencia a la guía del colegio colombiano de psicólogos “RE – inventando un sistema de cuidado de la SALUD EN CASA”. Relacionarnos a partir de la empatía nos permite que: antes de juzgar, concluir apresuradamente o hasta anticiparse a lo que alguien está comentando… lo voy a escuchar desde su punto de vista, desde sus nuevas preocupaciones, desde su necesidad.
VIVIR LAS RELACIONES Y SITUACIONES DESDE LA EMPATÍA nos va a permitir explorar una solución desde un punto de vista compartido. La empatía no es solo tener en cuenta los sentimientos del otro, es darse cuenta de que ese otro es parte de mi coexistencia; ahora ese otro existe en mi misma dinámica, que merece tanto respeto, puesto que coexistimos, compartimos y cohabitamos.
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No ser reactivos. Retrasar un poco el impulso a responder acaloradamente, respirar y tomarse el tiempo de calmarse y pensar antes de actuar. No es necesarios engancharse en una discusión o pelea que solo deja perdedores; nada lo justifica. No se deje cargar emocionalmente como una olla a presión, que cuando llega al máximo calor suelta la presión a través de la válvula de escape. Deje que su válvula de escape se libere gradualmente y con calma. En esto es muy común que terminamos estallando con quien menos tiene que ver, con lo que nos ha ocurrido. SER EMPATICOS.
Y algo muy importante en el cuidado emocional es aprender el manejo, especialmente en un momento de crisis, para esto Voy a tomar algunas recomendaciones de la Doctora en Psicología Clínica María Clara Cuevas Jaramillo, sobre el control emocional en las diferentes etapas del desarrollo.
Qué se puede hacer con los niños en etapa preescolar en un momento de crisis:
Mostrar paciencia y tolerancia, proporcionar respaldo verbal y físico, fomentar la expresión a través del juego, la recreación, narración de historias, planificar actividades relajantes y reconfortantes antes de acostarse, mantener las rutinas familiares, evitar la excesiva exposición a los medios, dar nombre a la emoción.
No se debe: No prestar tanta atención a todos los comportamientos negativos, No actuar de manera impaciente (gritar, mostrar desespero…), no mentir para calmar (cálmate y te llevo al parque), no tomarse apecho las expresiones verbales, no encerrar, no decirle como sentirse y no invalidar la emoción.
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Con los niños de 7 a 12 años, permitirles mantener contacto con sus amigos, inducir al ejercicio regular, invitar a participar en actividades educativas (libros de trabajo, juegos educativos), incluirlos en las tareas del hogar estructuradas a su edad, establecer límites suaves pero firmes, hablar sobre lo que ocurre, permitiéndole expresar sus ideas, opiniones. No se debe gritar, amenazar, no usar castigos físicos ni maltrato psicológicos, no agredir verbalmente, no minimizar lo que está sintiendo y no ceder a todas las presiones.
Con los adolescentes y jóvenes 13 y 18 años, si se puede respaldar, validar sus emociones, escuchar sus argumentos, ayudarle a expresar lo que siente y piensa, ayudar a calmar (primero estar calmados nosotros), permitir silencios, fomentar la continuación de rutinas, inducir a apoyar a los hermanos menores.
No se debe gritar, insultar, invalidar, amenazar, obligarlo a hablar, no usar sarcasmos, no usar cantaleta, no interrumpir actividades con amistades (red de apoyo) y por último no decirles lo que pueden sentir.
“Con estas recomendaciones, concluimos nuestra intervención sobre Orientación Escolar en Casa, esperando que puedan ponerlas en práctica y no olviden que ante cualquier evento que amenace su seguridad y bienestar pueden acudir a las líneas de atención línea de la Esperanza 3228142684 de la Secretaria de Salud, atención de psicología 24 horas. Líneas de orientación psicosocial y jurídica para la mujer, de la Secretaría para la Mujer, 3187488096 y 320 3922303 psicología y 3124175460 y 3108531086 de Trabajo social”, concluye la Psicóloga Doris Margarita Algarra Echenique.
No se deje cargar emocionalmente como una olla a presión, que cuando llega al máximo calor suelta la presión a través de la válvula de escape.
