Sixto Vargas descansa en los amorosos brazos del Padre Eterno

Su esencia especial, su incansable laboriosidad y su corazón generoso fueron ejemplos vivos para todos los que tuvieron el privilegio de cruzar su camino.

En estos momentos de dolor, sus hijos: Leticia, Freddy, Viviana, Andrea y Camila Vargas, así como su nuera, yernos, nietos, hermanos, cuñados, sobrinos y demás familiares, desean expresar su más sincero agradecimiento por las muestras de cariño y condolencias recibidas.

Invitan a todos los que lo conocieron a rendirle un último homenaje en las exequias que se llevarán a cabo el jueves 15 de febrero a las 3:00 de la tarde en la Catedral Diocesana de Zipaquirá.

El lugar de velación está ubicado en Complejo 50 años Sala Ofrenda del Parque Cementerio Zipaquirá, en la Calle 4 No. 28-75.

Descansa en paz, querido Sixto. Tu legado de amor y bondad perdurará por siempre en los corazones de su familia y de quienes lo conocieron.

Oración.

Dios amoroso y compasivo, en este momento te encomendamos con profunda devoción el alma de Sixto Vargas Pinzón. Que tu infinita misericordia envuelva su ser, llevándolo hacia la morada eterna donde brille tu luz divina.

Te pido, Señor, que recibas con amor su espíritu, que lo liberes de todo peso y lo colmes de tu paz infinita. Que encuentre consuelo y descanso en tu presencia, y que todas las buenas obras que realizó en vida sean un testimonio vivo de tu gracia y amor en el mundo.

Bendice, oh Dios, a su familia y seres queridos, consolándolos en su dolor y fortaleciéndolos con tu amor inquebrantable. Que encuentren consuelo en la certeza de que don Sixto ahora descansa en tu seno, libre de todo sufrimiento y rodeado de tu amor eterno.

Te pedimos también, Señor, que su ejemplo de generosidad, bondad y rectitud perdure en nuestras vidas, inspirándonos a seguir su camino de servicio y entrega hacia los demás.

Encomendamos su alma a tu infinita misericordia, confiando en que, por tu gracia, encuentre la vida eterna junto a ti. Amén.