La Procuraduría General de la Nación (PGN) logró que el Tribunal Contencioso Administrativo del Archipiélago ordenara medidas urgentes para proteger los ecosistemas marinos de los cayos Rose y Haines Cay, reconocidos como Cayo Acuario, uno de los destinos más visitados del Caribe colombiano.
Problemas detectados
El fallo se basó en las pruebas presentadas por el Ministerio Público, que evidenciaron un grave deterioro ambiental debido al turismo masivo, la ausencia de control institucional y la carencia de servicios sanitarios adecuados. Bajo el principio de precaución, la Procuraduría sustentó la necesidad de una acción inmediata para evitar daños irreversibles.
La investigación reveló múltiples irregularidades que afectan la sostenibilidad del área:
- Comercios funcionando sin infraestructura básica.
- Descargas de aguas contaminadas al mar.
- Erosión acelerada por el tránsito excesivo de embarcaciones turísticas.
Decisiones del Tribunal
En respuesta a estas afectaciones, el Tribunal dispuso:
- Cierre total de Rose Cay durante seis meses.
- Cierres trimestrales de tres días en Haines Cay para su recuperación ecológica.
- Desmonte de estructuras fijas instaladas en la zona.
- Realización de estudios técnicos actualizados sobre capacidad de carga.
- Reubicación de la actividad comercial bajo parámetros de sostenibilidad.
Compromiso con la sostenibilidad
Estas disposiciones se adoptaron tras la actuación preventiva de la Procuraduría, que intervino para garantizar la protección de los derechos colectivos y del patrimonio natural del Archipiélago.
La Entidad informó que seguirá vigilando el cumplimiento del fallo y las acciones que deben adelantar Coralina, la Dirección General Marítima (DIMAR) y la Gobernación del Archipiélago, con el fin de asegurar la recuperación y preservación de este ecosistema único del Caribe colombiano.

Orden de desmontar estructuras ilegales y reubicar
comercios bajo criterios sostenibles.