El asesinato de Luis Alfonso Valencia, dueño de una reconocida empresa de arepas, y de su mayordomo Darío López Herrera, ocurrido el 11 de noviembre de 2024 en una finca de Guaduas (Cundinamarca), ya tiene condenados.
La Fiscalía General de la Nación confirmó que Johan Daniel Pinzón Díaz y Sergio Alejandro Gómez Quintero aceptaron su responsabilidad mediante un preacuerdo y fueron sentenciados por un juez penal de conocimiento a largas penas de prisión. Pinzón Díaz deberá pagar 36 años tras las rejas, mientras que Gómez Quintero cumplirá 36 años y 8 meses de cárcel.
El trabajador que traicionó y el sicario que disparó
Las investigaciones de un fiscal de la Seccional Cundinamarca permitieron establecer que Pinzón Díaz, empleado de la finca, suministró información detallada sobre los bienes de valor del empresario. Con esos datos, un grupo armado planeó y ejecutó el ataque.
Por su parte, Gómez Quintero participó directamente en el crimen: entró al predio armado, amordazó a las víctimas, las dejó indefensas y disparó sin piedad. Tras el doble asesinato, escapó en un vehículo con varios artículos robados.
La caída de los responsables
Los dos implicados fueron capturados en febrero de 2025 y desde entonces permanecían privados de la libertad en un establecimiento carcelario. El reciente fallo consolida la responsabilidad penal de ambos y envía un mensaje contundente contra quienes atentan contra la vida y la seguridad de la comunidad trabajadora y empresarial.
Este caso conmocionó a Guaduas y al departamento de Cundinamarca por la brutalidad de los hechos y por la forma en que la traición y la violencia terminaron con la vida de dos hombres reconocidos en la región.
El trabajador entregó información para facilitar
el ataque y el sicario disparó sin piedad.
