Funeral y asistencia espiritual virtual en Nueva York, la respuesta de un sacerdote al coronavirus

Un sacerdote colombiano en el área de Long Island se reinventa y buscar la manera de mantenerse conectado con sus feligreses en estos momentos de dolor.

Padre Fernando Echeverri, de la Iglesia The Holy Name of Mary.

NUEVA YORK, EEUU.

Celia Mendoza. La Voz de América.

El gran número de muertes en el estado de Nueva York producto del coronavirus, llevó a un sacerdote colombiano en el área de Long Island a reinventarse y buscar la manera de mantenerse conectado con sus feligreses en estos momentos de dolor.

“Aquí en Long Island, estamos críticos, críticos, aquí tenemos la feligresía, muchos están contagiados y otros están conectados en los hospitales. Tengo muchos amigos que están conectados”, expresó el sacerdote.

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El padre Fernando Echeverri, de la Iglesia The Holy Name of Mary, (El Santo nombre de María), en Stream Valley, Long Island, Nueva York habló vía Facetime con Celia Mendoza para La Voz de América, mediante el mismo método que está usando para dar los santos óleos y ungir a los enfermos al no permitírsele la entrada al hospital: “Doy la bendición a la persona muy cerca al móvil y les doy la absolución de desde acá. Virtualmente hacemos una oración y les impregnamos de un poquito de fortaleza para esa situación, pero no podemos hacer más porque es una situación bastante complicada para todos”.

Mientras las puertas de las Iglesias siguen físicamente cerradas, el padre Echeverri ha encontrado la manera de mantener abierta la comunicación con las familias de las víctimas de coronavirus y de aquellos que ha muerto durante esta crisis sanitaria.

“Hice un funeral virtual, me mandaron los nombres y las fotos de todos los que murieron y pusimos en el altar alrededor de 300 fotos con los nombres y nos conectamos por Facebook y les mencionamos y tratamos de acercarlos un poquito a esa gracia y esa bendición de tener una celebración religiosa, unas honras fúnebres al menos de una manera virtual, comenta el sacerdote”, quien agregó: “Ya que, aunque en algunas funerarias aceptan servicios presenciales de 10 o menos personas, manteniendo el distanciamiento virtual, el riesgo es alto”.

 En la última funeraria de unos amigos que me comentaron todos salieron contagiados también, así que también es un pánico colectivo un miedo colectivo”.

Finalmente dijo que el mensaje que le envía a todos en estos momentos de pandemia es que, a pesar de todo, como el Ave Fénix resurgiremos más fuertes y el Señor Jesús nos está permitiendo este viacrucis, esta cruz tan pesada, pero para triunfar hay que sufrir”.

A pesar de todo, como el Ave Fénix resurgiremos más fuertes y el Señor Jesús nos está permitiendo este viacrucis, esta cruz tan pesada, pero para triunfar hay que sufrir”.