Zipaquirá se prepara para recibir una de las actividades más sentidas de la temporada navideña: Familias por la Navidad, un encuentro espiritual que desde hace más de cinco décadas transforma vidas en distintas regiones del país.
La cita es el domingo 30 de noviembre a las 4:00 p. m. en el Salón Comunal del Barrio Algarra I (Calle 6A No. 11-32), con un aporte voluntario de $4.000 para quienes deseen participar.
Este evento, nacido hace más de cincuenta años en Cali, conserva intacto su propósito original: invitar a cada persona a convertir su corazón en un pesebre vivo donde Jesucristo pueda renacer, iluminando los hogares con esperanza y propósito. Lo que comenzó como una iniciativa comunitaria se ha convertido en una tradición que hoy llega a Zipaquirá con la misma fuerza espiritual que inspiró su creación.
Un espacio para detenerse, agradecer y reencontrarse
En un tiempo marcado por la agitación cotidiana, Familias por la Navidad propone una pausa necesaria para reflexionar, agradecer y permitir que la luz de Jesús abra nuevos caminos. Los organizadores destacan que la Navidad no debe reducirse a una fecha, sino entenderse como un mensaje que recuerda el amor de Dios manifestado a través de Su Hijo, un regalo de esperanza para cada familia.
La actividad invita a los asistentes a mirar hacia adentro, sanar heridas emocionales, reconciliar vínculos y fortalecer los valores que sostienen la vida familiar. En ese espíritu, el evento se ha convertido en un punto de encuentro para quienes buscan renovar su fe, compartir con sus seres queridos y vivir una tarde alejada de las tensiones cotidianas.
Una tarde para compartir en comunidad
Familias por la Navidad se caracteriza por reunir a personas de todas las edades. Niños, jóvenes y adultos participan en una programación que combina reflexión, alabanza, mensajes espirituales y momentos de integración.
El ambiente cálido y cercano que se genera en cada edición permite que los asistentes se sientan acompañados, escuchados y fortalecidos.
En Zipaquirá, la celebración llega para ofrecer un espacio seguro, cercano y profundamente humano, donde la comunidad podrá reencontrarse consigo misma, abrir el corazón y preparar el espíritu para el cierre del año. Es una oportunidad para que cada familia renueve su fe, recupere la unidad y se disponga a recibir la Navidad con un sentido más profundo.
Una invitación para transformar el final de año
Los organizadores hacen un llamado a la ciudadanía para participar con disposición y apertura.
“Este tipo de encuentros tienen la capacidad de tocar vidas, de encender nuevamente la esperanza”, afirman quienes lideran la actividad, destacando que la verdadera fuerza de la Navidad está en su capacidad de acercar a las personas a Dios y a su entorno familiar.
“Hagamos de esta Navidad una oportunidad para acercarnos a Dios y fortalecer nuestra unidad familiar”, es el mensaje que resume el espíritu de esta convocatoria.
Familias por la Navidad invita a convertir el corazón en un pesebre vivo donde Jesús renueve cada hogar.
