El desplazamiento del Destructor ARC Córdoba desde la Base Naval de Cartagena hasta el Parque Jaime Duque, en Tocancipá (Cundinamarca), sigue siendo una de las maniobras de transporte terrestre más singulares ejecutadas en Colombia. El buque, de cerca de 90 metros de eslora, había sido donado por la Armada Nacional para convertirse en un museo y preservar su legado histórico.
El proyecto fue liderado por el Capitán Jaime Duque Grisales, quien viajó a Cartagena con un equipo de 19 colaboradores para iniciar el desmontaje. La operación, que comenzó en 1980, implicó un inventario minucioso, 407 piezas extraídas y 156 secciones principales cortadas para permitir su traslado por carretera.
¿Cómo se ejecutó el desmantelamiento del ARC Córdoba para su traslado?
El equipo diseñó cortes lo más amplios posible, con piezas que alcanzaron hasta 20 metros de ancho y alto, una escala que retaba la capacidad de la red vial del país. Cada corte quedó registrado en una bitácora técnica que serviría como guía para reensamblar el buque en su destino final. Esta planeación permitió que el proyecto avanzara sin perder la integridad estructural ni histórica de la nave.
¿Qué tipo de operación logística permitió movilizar el buque por más de 1.100 kilómetros?
Entre finales de 1980 y comienzos de 1981, 16 vehículos (entre tractomulas y camiones doble troque) transportaron los componentes rumbo a Tocancipá. Cada trayecto tomó en promedio 30 horas. Las piezas más grandes, incluidos mamparos, mástil, puente de mando, chimenea y cubiertas, se distribuyeron en viajes escalonados según su peso y volumen. La operación demandó precisión en rutas, cargas, escoltas y tiempos de tránsito.
¿Cómo fue el proceso de reconstrucción una vez las piezas llegaron al Parque Jaime Duque?
El reensamblaje comenzó en 1981 y se extendió durante diez meses. El buque fue instalado en el área conocida como “Mar Caribe”, un mapa a escala dentro del parque. Para 1983, el ARC Córdoba ya estaba completamente armado y listo para la inauguración del lugar, consolidándose como una de las atracciones principales y como un museo naval en tierra firme.
¿Cuál es el valor histórico de esta pieza hoy?
El Destructor ARC Córdoba no solo representa un fragmento de la historia marítima colombiana, sino también un ejemplo de ingeniería y logística que marcó un hito nacional. Actualmente, los visitantes pueden recorrerlo y conocer de primera mano la trayectoria de una nave que participó en la Segunda Guerra Mundial y que hoy continúa cumpliendo un papel pedagógico.
Actualmente, los visitantes pueden recorrerlo y conocer de primera mano la trayectoria de una nave que
participó en la Segunda Guerra
Mundial y que hoy continúa
cumpliendo un papel pedagógico.
