30 años de ‘Pies Descalzos’, el álbum que cambió el destino de Shakira… y el corazón de una generación

De un lanzamiento discreto en octubre de 1995 a un fenómeno continental que transformó el pop latino.

Por
Manuela Vargas
Periodista y redactora Extrategia Medios.
5 min de lectura
Portada del álbum Pies Descalzos. Imagen tomada de Almacenes MiMúsica.
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A mediados de los noventa, Colombia era un país que apenas comenzaba a mirar hacia su propia música con nuevos oídos. Las emisoras de la época repetían baladas románticas, el rock nacional intentaba abrirse paso, y el pop femenino seguía atado a moldes conservadores. En ese escenario, casi sin ruido mediático, una joven barranquillera de 18 años lanzó un disco que parecía no tener destino: Pies Descalzos.

Era octubre de 1995, y Shakira Isabel Mebarak Ripoll regresaba a la industria tras dos intentos fallidos. Su sello discográfico, Sony Music Colombia, apenas destinó un presupuesto limitado para la producción y promoción. Pocos creían que aquel tercer álbum, grabado entre Bogotá y Miami con la coproducción de Luis Fernando Ochoa, pudiera marcar diferencia. Pero Shakira, obstinada y curiosa, había decidido que esta vez todo debía pasar por su pluma, su guitarra y su instinto.

Un disco que hablaba distinto:

Pies Descalzos no se parecía a nada que sonara en la radio colombiana. Tenía guitarras de rock alternativo, una voz rasgada que no pedía permiso y letras que hablaban de amor, culpa, cuerpo y sociedad con una franqueza poco común en la época.

Canciones como “Estoy aquí”, “Antología” y “Pies descalzos, sueños blancos” mostraban una nueva manera de entender el pop: con sensibilidad poética, crítica social y un aire de autenticidad que desafiaba el molde de “estrella juvenil” al que la industria quería someterla.

En ese entonces, Shakira leía a Benedetti y Neruda, y eso se sentía. En sus letras había un equilibrio entre vulnerabilidad y lucidez. Cantaba al amor, pero también al miedo, a la contradicción y a la presión de los ideales impuestos.

El éxito que nadie vio venir:

Al principio, las ventas fueron modestas. Sin embargo, en cuestión de semanas, “Estoy aquí” comenzó a sonar con fuerza en las emisoras de Medellín y Barranquilla. Su videoclip (grabado en un estudio oscuro, con ella tocando una guitarra y bailando descalza) atrajo la atención de MTV Latinoamérica, que por entonces apenas daba sus primeros pasos.

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El fenómeno fue inmediato. En 1996, el disco fue relanzado en varios países de América Latina. La voz de Shakira, su estilo mestizo y su autenticidad cruzaron fronteras. De un lanzamiento local sin expectativas, Pies Descalzos pasó a vender más de cinco millones de copias y a convertir a su autora en la nueva cara del pop latino.

El eco de una generación:

El impacto de aquel álbum fue mucho más profundo que sus cifras. Shakira demostró que una mujer podía escribir, producir y defender su propio lenguaje en una industria dominada por fórmulas masculinas.

Su estética (cabello oscuro, pies descalzos, ropa sencilla) poco a poco fue un símbolo de honestidad y libertad creativa.

Pies Descalzos cambió su vida;
también cambió la percepción de lo que podía ser una artista latina:
intelectual, emocional y popular al mismo tiempo.

De símbolo a causa:

Años más tarde, Shakira fundó la Fundación Pies Descalzos, dedicada a la educación de niños vulnerables en Colombia. El nombre no fue casual: provenía del álbum que la conectó con su tierra y con el sentido más simple de la palabra humanidad.

Hoy, tres décadas después, aquel disco sigue sonando vigente. Sus guitarras suenan a rebeldía adolescente, sus letras conservan una madurez precoz, y su espíritu recuerda que los grandes cambios suelen empezar en silencio, descalzos, con el corazón al ras del suelo.

Y yo te agradezco, Shakira, por
salvarnos la vida con tu música.
Gracias por Pies Descalzos, mi álbum favorito, el disco con el que
(casi al mismo tiempo) nací.
Con sus guitarras aprendimos que la vulnerabilidad también puede ser una forma de fuerza, y que descalzarse, a veces, es la única manera de tocar el suelo de verdad.

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Periodista y redactora Extrategia Medios.