Un criadero de cerdos ubicado en la vereda Río Frío Occidental, en el municipio de Tabio (Cundinamarca), fue suspendido por las autoridades ambientales tras evidenciarse múltiples irregularidades que ponían en riesgo el entorno natural, especialmente la quebrada El Alcaparro.
Durante una visita técnica, el equipo de la Regional Sabana Centro de la CAR, detectó que en el lugar se encontraban 11 cerdos confinados, junto con acumulaciones de excretas y porcinaza líquida sin ningún tratamiento previo, lo que generaba fuertes olores ofensivos.
La infraestructura presentaba un notorio estado de deterioro, sumado a serias deficiencias en el manejo de aguas residuales.
La decisión de intervenir fue tomada gracias a la oportuna denuncia de la comunidad local, que alertó sobre los impactos negativos de la actividad porcícola en esta zona rural. En consecuencia, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ordenó la suspensión inmediata de las actividades en el predio como medida preventiva, mientras se avanza en la evaluación de otros posibles daños ambientales para determinar las sanciones correspondientes.
Esta acción busca preservar la integridad de los recursos hídricos y garantizar condiciones ambientales adecuadas en la región.
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Infraestructura deteriorada, mal manejo de residuos y
olores ofensivos motivaron la suspensión del criadero.
